Si estás pensando en quedarte embarazada, lo has intentado o has comenzado algún tratamiento para cumplir tu sueño de ser madre, seguro que ya has escuchado, leído o hablado acerca de la fase lútea y su importancia para lograr tu objetivo. Pero, ¿qué es la fase lútea?, ¿cómo funciona?, ¿cómo puedo saber si es el momento? Sigue leyendo y descubre todo lo que necesitas saber acerca del tercer periodo del ciclo menstrual.
¿Qué es la fase lútea?
La fase lútea del ciclo menstrual es el periodo que empieza justo después de la ovulación y dura hasta el día antes del comienzo del siguiente periodo menstrual. Por normal general, suele durar entre 12 y 14 días, pero se puede alargar o acortar en función de la regularidad de cada mujer. Además, es fundamental conocer bien su funcionamiento porque es muy importante para lograr el embarazo. De este modo, cuando el óvulo ha sido fecundado su desarrollo es distinto que cuando se prepara para el siguiente ciclo. En el caso de que no se produzca la fecundación, la fase lútea se caracteriza por el síndrome premenstrual: una etapa que se distingue por síntomas de depresión, tensión mamaria, cambios de humor e irritabilidad, entre otros.
Durante esta etapa, la estructura que se desarrolla en el interior de los ovarios para sostener el óvulo, más conocida como cuerpo lúteo o cuerpo amarillo, empieza a producir progesterona. Una hormona cuya función principal es la de preparar al endometrio para facilitar la implantación y la alimentación del huevo fecundado hasta que pueda nutrirse de la placenta. Para ello, engrosa sus paredes y estimula el cuello del útero para que segregue un moco muy espeso que impida la entrada de gérmenes que afecten a su crecimiento.
Si no se llega a producir la fecundación, el cuerpo de la mujer comienza a prepararse para eliminar el óvulo y el revestimiento del útero en el siguiente periodo.
¿Cómo sé si es el momento?
Ahora que ya has descubierto lo que es la fase lútea, si eres una mujer con ciclos menstruales regulares, te será muy fácil reconocer cuándo te encuentras en este periodo. La fase lútea comienza alrededor del día 14-15 del ciclo menstrual. Sin embargo, si eres irregular, debes aprender a reconocer los cambios que se producen en tu cuerpo para averiguarlo.
- Cambios en el flujo vaginal. El moco cervical durante la ovulación es muy peculiar y podrás distinguirlo fácilmente. Su consistencia es pegajosa y muy elástica. El flujo en esta fase experimenta esta transformación para ayudar a los espermatozoides a llegar hasta el óvulo.
- Dolor pélvico leve.
- Aumento de la temperatura basal. Como consecuencia de la ovulación y la progesterona, la temperatura basal aumenta entre dos y cinco décimas. Este incremento se mantiene hasta que comienza de nuevo el ciclo menstrual.
Fase lútea corta
Sin embargo, si la fase lútea es demasiado corta (menos de 10 días), pueden existir complicaciones que dificulten la implantación del óvulo y la consecución del embarazo. Así bien, en ocasiones, el cuerpo no secreta suficiente progesterona para que se desarrolle con normalidad el revestimiento uterino. Por lo que tener una fase lútea corta es una causa de infertilidad, ya que aunque se produzca la fecundación del óvulo, se puede producir un aborto espontáneo temprano, a causa de no tener un revestimiento uterino óptimo o que se desprenda el revestimiento antes de tiempo.
Además, hay una serie de enfermedades que se asocian con la fase lutea corta:
- Síndrome de ovario poliquístico.
- Endometriosis.
- Trastornos tiroideos.
- Anorexia.
- Obesidad.
- Excesivo ejercicio físico.
- Estrés.