Cuando una pareja decide tener un hijo generalmente piensa que en poco tiempo conseguirá el embarazo, sin embargo, con frecuencia ocurre que pasan los meses y el embarazo no llega. Esta tardanza en alcanzar el objetivo tan deseado puede generar cierto malestar. Es probable incluso que últimamente estés notando algunos cambios en tu vida (en tu estado de ánimo, en tu relación de pareja, en el trabajo, con los amigos y la familia…).
Desde la unidad de apoyo emocional podemos reducir tus niveles de estrés, brindarte estrategias de resolución de problemas, mejorar tu comunicación de pareja, ayudarte en el manejo de pensamientos negativos y ofrecerte un espacio de confianza donde hablar libremente de lo que te preocupe.
La primera vez que acudas a la clínica probablemente tengas la sospecha de que existe alguna dificultad. Tal vez tu situación sea diferente, es posible que ya hayas realizado algún tratamiento en otro centro y quieras conocer nuestra opinión. En cualquier caso, el miedo y la ansiedad que genera una situación de incertidumbre como ésta es compartida por la mayoría de las personas que están en tu situación. Es normal sentirse así.
Una vez que iniciemos el tratamiento, es posible que tus emociones oscilen de la ilusión por iniciar el proceso al temor a no conseguir el embarazo. Estos cambios emocionales van a ser frecuentes durante todo el tratamiento: notarás que en estos días te encuentras más inquieta que de costumbre, y no te asustes si tienes ganas de llorar o estás más irritable. Con frecuencia, pensamos que no tener hijos como lo habíamos planeado es injusto. Algunas personas incluso se culpan por ello.
Durante un tratamiento de reproducción asistida pueden surgir algunas situaciones que no estemos acostumbrados a abordar. Afrontar los posibles resultados negativos, situaciones de presión social, momentos en los que se plantea abandonar el tratamiento o la tensa espera hasta el día de la analítica del embarazo (beta espera) o comunicar el embarazo a personas cercanas, pueden generarnos ansiedad y momentos de stress psicológico.
VIDA RECOLETAS pone a tu disposición una Unidad de Apoyo Emocional, donde podrás hablar sobre lo que estás sintiendo y donde se te darán pautas para hacer frente con mayor serenidad a todo este proceso. Además, a todos los pacientes de la clínica se les ofrece una primera consulta incluida en su tratamiento, en la que se les orientará sobre la mejor forma de afrontar la situación que está atravesando con el deseo de que juntos, podamos llegar a tu esperado embarazo.
Desde la Unidad de Apoyo Emocional se te informará sobre las distintas fases por las que puedes pasar una vez que comiences el tratamiento y se te ayudará a desarrollar tus recursos para afrontar el estrés emocional y físico, facilitando que puedas expresar y manejar tus emociones y elaborando estrategias de afrontamiento eficaces.
Queremos ayudarte a sobrellevar tu tratamiento de la mejor forma posible. Por ello, ponemos a tu disposición una serie de recursos en forma de Talleres Online para ofrecerte un espacio de confianza en el que te puedas expresar.
Estos talleres online, totalmente gratuitos para nuestras pacientes, están impartidos por nuestra psicóloga y cubren temas como el autocuidado, la autoestima o la relación de pareja en los tratamientos de reproducción asistida, entre otros. Nuestro objetivo es ofrecerte en cualquier momento del proceso el apoyo y acompañamiento que necesites para conseguir tu bienestar emocional.
El abordaje multidisciplinar del paciente ya es habitual en diferentes campos de la medicina, por eso desde Vida Recoletas consideramos que en reproducción asistida no se debe obviar la parte psicológica y prestarle la misma atención que a la parte física.
Si vais a empezar un tratamiento de reproducción asistida hay una parte fundamental del tratamiento que no podéis olvidar; las emociones. Desde nuestra Unidad de Apoyo Emocional hemos preparado una guía en la que encontrarás información sobre los momentos de mayor intensidad emocional y formas de afrontarlos
El camino de la reproducción asistida en ocasiones es un poco complicado de transitar, por eso el apoyo psicológico es fundamental. En los tratamientos de reproducción asistida se mezclan factores puramente biológicos y médicos con sentimientos y aspectos emocionales inesperados que en algunas ocasiones puede costar manejar.
Por eso, en nuestra unidad siempre hemos defendido el soporte emocional como parte del tratamiento integral de la infertilidad.
El coste emocional de la infertilidad
El momento en que una pareja decide dar el paso de ampliar la familia, es un momento alegre y emocionante para ellos. La búsqueda del embarazo tiene un significado muy importante porque supone un proyecto de vida y un afianzamiento de su compromiso. Sin embargo, toda la ilusión que se pone en la búsqueda del embarazo puede verse truncada cuando después de muchos meses el esperado embarazo no llega.
Cuando la pareja decide buscar una solución a este problema, comienzan a surgir sufrimiento emocional. Esto se debe a que pensamos que conseguir quedarnos embarazadas es más fácil de lo que realmente es.
Una vez que las parejas se ponen en manos de los profesionales médicos y reciben el diagnóstico de infertilidad se genera un shock emocional. Porque a pesar de que en el fondo sepan que algo no va bien, escucharlo del equipo médico tiene un gran impacto. Procesar esta noticia puede suponer una crisis vital para las personas que lo reciben.
El shock emocional producido por la noticia es poco a poco reemplazado por sentimientos de negación, tristeza, temor, incredulidad, inquietud y culpa.
En muchos casos, el no compartir esta imposibilidad para conseguir el embarazo de forma natural hace que las parejas se sientan solas y sienten que han perdido control sobre su vida. Al mismo tiempo, se produce un cambio en las creencias previas, surge una época de incertidumbre donde sus valores se ven cuestionados y se replantean su forma de vida.
Además de tener que gestionar este golpe emocional, después del diagnóstico estas personas deben tomar una serie de decisiones importantes, decidir si empezar con un tratamiento de Reproducción Asistida, y en caso de que se opte por seguir adelante, conocer la opción más adecuada a sus circunstancias que recomiende el equipo médico.
La presencia del psicólogo en las unidades de reproducción asistida es importante ya que las parejas con problemas de fertilidad se enfrentan en muchas ocasiones a procesos de tratamiento largos y con un enorme coste emocional. Prestar el adecuado soporte emocional es una condición indispensable en la atención asistencial, para ayudarles a enfrentar la ansiedad, la frustración, la tristeza y la angustia que suponen las diferentes fases del proceso dentro de los tratamientos de reproducción asistida
Por ello es importante no descuidar la atención al impacto emocional de la infertilidad y en Vida Recoletas la asistencia integral de la pareja con problemas de infertilidad incluye el apoyo psicológico desde el primer momento.
Una vez que se conoce el diagnóstico, el trabajo de la unidad de apoyo psicológico consiste en centrarnos en ayudar a cuantificar el sufrimiento subjetivo de las parejas dependiendo de sus características personales y psicosociales y asegurarnos que los pacientes comprendan las implicaciones de sus opciones de tratamiento. Para que puedan enfrentarse de manera saludable al estrés que puede ocasionar un tratamiento de reproducción asistida, se les ofrecer apoyo emocional en todas las fases del proceso, tanto de manera individual como en pareja.
También se les informa sobre las distintas fase emocionales por las que pueden pasar una vez que comienzan el tratamiento: periodos de ilusión, esperanza, miedo y ansiedad. Se trabaja con ellos en desarrollar sus recursos para afrontar el estrés emocional y físico, facilitando que puedan expresar sus emociones, y elaborando con ellos estrategias de afrontamiento eficaces.
El abordaje multidisciplinar del paciente ya es habitual en diferentes campos de la medicina, por eso en Vida Recoletas consideramos que también debemos prestar una buena atención a la parte psicológica en reproducción asistida.